Luego de dos años, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Pnud, da a conocer los resultados de su Informe de Desarrollo Humano sobre la Colombia rural, con descubrimientos poco alentadores.
La concentración de la tierra y el abandono del sector rural, son evidenciados por este informe, en el que se especifica que Antioquia y el Valle del Cauca son los departamentos donde hay más concentración de la tierra.
Además, se evidencia la necesidad de desarrollar un censo agropecuario (que no se hace desde hace 40 años) y que por lo tanto no hay una información contrastable sobre la estructura de la tenencia de la tierra.
Hay un atraso en la actualización catastral del 45%; cerca del 40% de los derechos de propiedad están en la informalidad y cerca de 6,5 millones de hectáreas fueron despojadas y abandonadas durante el conflicto armado hasta el año 2010.
Por si lo anterior fuera poco, el informe alerta sobre un extraño mercado de tierras, básicamente en manos de los actores ilegales.
Y siguen los descubrimientos: Colombia tiene más territorio destinado a la minería que a la producción de alimentos, hay demasiada tierra inexplotada (en poder de muy pocos ciudadanos que no las desarrollan) y que el Estado es un actor totalmente ausente del campo, donde vive el 32% de la población total del país.
El gobierno nacional tiene en este informe, una excelente herramienta para comenzar a realizar la verdadera redención del campo, que es el que podrá soportar la seguridad alimentaria. La radiografía de la situación rural del país, permitirá comenzar a pagar esa deuda a la Colombia rural.
No hay comentarios:
Publicar un comentario