martes, 27 de marzo de 2012

NARCO COMUNIDADES SE REPARTEN LA DROGA

Enlace Programado por Gabriel Alberto Restrepo Sotelo es LINTERNA ROJA EN GOOGLE .-.
PERIODISTAS ASOCIADOS DE COLOMBIA
REGISTRO 20-27
“Narco-comunidades” se reparten la droga

Foto  
. Alegre reparto de dinero y drogas para población, jueces comunales, líderes religiosos y hasta policías
En las comunidades de la RAAN la gente tiene un concepto equitativo de la repartición de la droga. (LA PRENSA/G. MIRANDA)
 
José Adán Silva y
Walter Treminio U.
nacionales@laprensa.com.ni

No son precisamente “narco-aldeas” como las de Colombia, pero cada vez se organizan más en torno a un negocio que les resuelve las necesidades sociales que el gobierno ignora: el narcotráfico.

Más de 10 comunidades indígenas de la Región Autónoma Atlántico Norte (RAAN), se han organizado para la pesca, venta y distribución de cocaína que les llega a sus costas provenientes de naves colombianas.

La denuncia inicialmente la hizo a LA PRENSA el alcalde de Puerto Cabezas, Guillermo Espinoza Duarte, quien aseveró que en zonas costeras como Sandy Bay y Prinzapolka, comunidades indígenas se han organizado para “pescar” la droga, venderla en Honduras o en Puerto Cabezas, y administrar los recursos obtenidos, para beneficio de la comunidad.

La información fue confirmada por el subcomisionado Lee Edwin, jefe de Seguridad Pública de la RAAN, y por las propias autoridades de algunas comunidades indígenas de Sandy Bay Norte.

HASTA TRÁFICO INTERNACIONAL

Según Edwin, poco a poco las comunidades indígenas han ido organizándose en torno al negocio de la venta de drogas.

“Para 1990, con los primeros hallazgos de droga, las comunidades no conocían el valor comercial de la misma, la gente la hallaba y no le daba valor, la botaba; pero ahora negocian bien en Honduras con gente que viene de Gran Caimán, Panamá, Belice, Guatemala y El Salvador”, explica Edwin.

“Entonces ellos comenzaron a establecer sistemas de tráfico interno, o sea que ya conocían el valor del producto y ya no sólo se venían a buscarle venta aquí, sino que ampliaron el mercado hasta llegar a Managua vía contrabando, y así comenzaron a generar la forma de cómo hacer efectivo la droga encontrada. Nosotros en coordinación con el Ejército hemos ido descubriendo sus modos de operaciones, ellos han ido variando la forma de comercialización, ya casi no tienen mucha necesidad de arriesgarse a la comercialización interna, sino que se van por puntos ciegos a Honduras”, explica el jefe policial.

SOCIALIZAN LA DROGA

“Ellos socializan la droga, es una forma que han encontrado para sacar una utilidad, ellos lo ven como algo mandado del Cielo, como una bendición, pero en beneficio de todos”, señala Edwin.

Relata que cuando conocieron el valor de la droga y se encontraban los primeros cargamentos, hubo violentas disputas en las comunidades “porque el que encontraba la droga trataba de quedarse con ella”.

Para evitar que la comunidad se dividiera por la droga, los consejos comunales acordaron venderla o distribuirla entre todos sus miembros, para que no hubiese más muertos.

“Hoy en día han venido modificando el sistema: una vez que encuentran droga, la socializan; si alguien la encuentra se organizan para llevarla a la comunidad, y ahí comienza la repartición: una parte al juez comunal, una parte a la iglesia, otra a los ancianos y así han habido casos en que luego de vender la droga se ha repartido el dinero entre toda la comunidad, de forma equitativa, le dieron a todas las familias”, explica el jefe policial.

En estas comunidades también han proliferado las grandes construcciones de mansiones equipadas con sistema de televisión y telefonía satelital, y cuentan con modernos equipos de navegación.

DEFIENDEN SUS CARGAS

Señala el jefe policial que incluso se han dado incidentes violentos en algunos casos en que la Policía ha intentado recuperar la droga que cae en las comunidades.

El más grave de ellos ocurrió en el sector de Kum y Wasla, donde en marzo pasado cayó una avioneta con más de mil kilos de cocaína.

En esa ocasión grupos de indígenas secuestraron a una patrulla policial que intentaba recuperar la droga, y en la comunidad Tronquera, 30 kilómetros al sur del municipio de Waspán, los comunitarios cortaron con moto-sierras el puente por donde intentaban pasar la Policía y el Ejército para recuperar un cargamento de droga.

“Cuando cayó la droga, se movilizaron brigadas de comunidades indígenas, del Kum, Wasla, Trukutara y Trukusirpe y otras de Río Coco Abajo, que se dieron cita a ese lugar a tratar de recuperar la droga caída de la avioneta, y eso generó una confusión, pero fue un incidente sin mayores repercusiones”, señala el jefe policial.

LA "PROPINA"

El subcomisionado Lee Edwin, jefe de Seguridad Pública de la RAAN, confirmó que en muchos casos las comunidades les han entregado drogas, pero como parte de una campaña voluntaria para deshacerse de los problemas.

“A partir de los primeros hallazgos, nosotros tratábamos de movilizar personal para investigar, averiguar e incautar la droga, en una oportunidad ocurrió que la gente de la comunidad Sandy Bay incautó una panga con cerca de 1,500 kilos de coca; la llevaron a la comunidad, allá se repartió entre toda la comunidad, y recuperamos cerca de 60 kilos, y acordamos con los líderes comunales que entregaran cada cargamento de droga a la Policía Nacional, entonces se logró incautar cerca de 100 kilos de otro cargamento, pero a partir de eso, la comunidad optó por entregar a la Policía Nacional una pequeña parte de cada cargamento recuperado en las costas”, explica el jefe policial.

“Ahora cuando ellos agarran un cargamento, nos entregan de manera voluntaria una parte simbólica del hallazgo, el juez de la comunidad llega personalmente a entregar la droga, pero el concepto que ellos estaban manejando, es que debían darnos una propina de la droga encontrada, como para que nosotros no nos metiéramos en sus negocios; algunos aún lo manejan como si se tratara de un favor que le dan a la Policía; muchos ahora entregan una parte de la droga como para que nos señalen de cómplices, para desvirtuar la labor de la Policía Nacional, pero nosotros hacemos nuestro trabajo como la ley manda”, señaló Edwin.

POLICÍA AGARRA SU PARTE

Uno de los líderes comunales a quien LA PRENSA entrevistó en Sandy Bay, señaló que ellos, incluso, han dado droga a la Policía Nacional, para que no se meta en los negocios de los comunitarios. “Ellos (los policías) reciben dinero y kilos que les damos, para que se ayuden; no nos pueden decir nada”, dijo un líder de una comunidad de Sandy Bay.  
.

No hay comentarios:

Publicar un comentario