lunes, 15 de agosto de 2011

EN RISARALDA ESTAN GANANDO LAS ENCUESTAS MAS NO EL TRABAJO DEL CANDIDATO

Enlace Programado por Gabriel Alberto Restrepo Sotelo es LINTERNA ROJA EN GOOGLE.-.
Comentario del Director:
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Nos llama la atención lo que esta sucediendo con las encuestas políticas. observamos políticos experimentados con temor por los resultados de las encuestas  y de verdad nos asombra verlos desubicados, ya que están entregando su futuro, porvenir y resultados electorales, a unas cifras que bien pueden no estar consultando la realidad del pensamiento popular y mas bien podrian   existir intereses externos que  tienen el poder de manipular el resultado de tales encuestas.

Viene la otra pregunta que se están haciendo los Ciudadanos que hasta el presente no han sido encuestados: ? HASTA DONDE UNA FIRMA QUE SE ESPECIALIZA EN ENCUESTAS LO PUEDE HACER DE LA NOCHE A LA MAÑANA Y NO POSEER UN RECORD BASTANTE IMPORTANTE EN EL TIEMPO COMO ENCUESTADOR Y HABER PROBADO RESULTADOS POSITIVOS DE ACIERTO ELECTORAL EN MUCHAS CAMPAÑAS PASADAS???

En diferentes medios se escucha, lee o simplemente se ve: que los procedimientos para hacer campaña política, están siendo día a día degenerados por su contenido, por su forma o simplemente por su intención, se engaña, se miente, se tergiversa, se inventa, se auto flagela, se auto engaña, se auto denuncia, se auto enferma Etc,etc.
y la finalidad es desconcertar al Ciudadano de bien que vota y la realidad es que Termina votando por cualquiera menos por el que se merece el voto.

Creemos esto no esta bien y el Engaño, tarde que temprano se sabrá y los que visitan nuestro blog, saben que es verdad y en Pereira según comentarios de calle, ya ocurrió con algunas encuestas en el pasado, creemos no estamos seguros pero averiguaremos hasta donde pueden estar comprometidos dolosamente los encargados de Engañar a la opinión publica y hasta cuando los Ciudadanos de bien se Dejaran Engañar y Desconcertar. 

Hay políticos, ciudadanos y analistas que creen muy poco en las encuestas, ya que en el tiempo han sido precarios los aciertos en cifras electorales, aconsejamos a los Candidatos sin pretender ser Doctos en la Materia que: TRABAJEN, NO SE CONFÍEN, NO DESCANSEN, ESTÉN REPLANTEANDO SUS ESTRATEGIAS, LOGREN LA CONFIANZA DE SUS ELECTORES.

Nos parece estupendo, la rebeldia y la seguridad que tiene, en sus electores y equipo de campaña ,el doctor: ALBERTO ARIAS DAVILA, se pierde el dia en que se cuenten y  luego recuenten los votos depositados el dia de Elecciones antes no.

La verdad es que tendríamos una muestra perfecta si lográramos hacer un sorteo en el que todos los electores de un país tuviesen exactamente la misma posibilidad de ser entrevistados. La mejor muestra sería fruto del azar más completo.

En la práctica, esa igualdad de posibilidades no se da. Es más fácil encuestar a los habitantes de las ciudades que a los campesinos, a los de los barrios de clase media que a los de clase alta, etc. En la medida en que el azar total no funciona, los encuestadores toman una serie de medidas técnicas y hacen cuotas para que no sean entrevistados solamente los que tienen más posibilidad de serlo.

Las encuestas electorales están en el ojo de la polémica electoral contemporánea. Desde tiempos inmemoriales los seres humanos tenemos temores y actitudes mágicas frente a los instrumentos que parecen predecir el futuro. Esta tensión instintiva sumada a las pasiones de la lucha por el poder forman una mezcla explosiva que detona en cada campaña electoral.

Las encuestas son conocidas por el escándalo que produce en las campañas la publicación de la simulación electoral, que es una pregunta del formulario que averigua cómo votarían los ciudadanos si las elecciones fueran el día en que se realiza la encuesta. Los candidatos se obsesionan por esa pregunta. Los porcentajes producen polémicas estridentes. Unos dicen que según «sus» encuestas ganan, otros que las encuestas publicadas son falsas, otros que no creen en las encuestas. En varios países de América Latina se han hecho cuñas de televisión hablando de «verdaderas encuestas» y otros disparates.

Los temores mágicos han puesto el foco de la polémica en lo intrascendente y no en lo de fondo. Las encuestas son muy útiles para ganar una elección si se las usa como lo que son: una técnica de investigación. Su fuerza está en la cantidad y calidad de la información que proporcionan a quienes elaboran las estrategias electorales.

En una época en que la democracia se ha ampliado y los países no solo se manejan de acuerdo a lo que dicen las élites económicas o intelectuales, una campaña electoral necesita conocer lo que opinan los ciudadanos comunes acerca de los más diversos temas. La única forma de hacerlo es a través de la investigación científica y la herramienta privilegiada de ese tipo de investigación es la encuesta electoral3.

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