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Rastreo a los Piraquive se extiende a 14 países
María Luisa Piraquive (centro), con sus hijos, yernos y nueras. El senador Carlos Baena aparece a la derecha.
Foto: Archivo particular
La piedra angular es la fundación de la pastora María Luisa, quien llegó hace 23 días a Colombia.
Los vecinos del exclusivo
condominio Balcones de Buenavista, en Cajicá (Cundinamarca), son los
únicos que han visto, por estos días, al senador Carlos Baena y a la
pastora María Luisa Piraquive, líderes del movimiento Mira y de la
Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional.
Ambos literalmente se esfumaron hace 11 días, cuando se supo
que estaban siendo investigados por presunto enriquecimiento ilícito y
lavado de activos. Un par de días antes se difundió un video en
el que la pastora censura la participación de discapacitados en los
púlpitos de los 850 templos que su iglesia tiene en 45 países. (Lea
también: Viaje por el cuaderno ideológico de la pastora).
Algunos feligreses aseguraron que la pastora no había salido a
explicar los cuestionamientos éticos y judiciales en su contra porque
estaba de viaje en Estados Unidos. Pero EL TIEMPO confirmó, con un
allegado a la familia, que pasó el año nuevo en Quito (Ecuador) y que
regresó a Bogotá, vía Guayaquil, desde el 3 de enero.
“Oficialmente no ha vuelto a salir del país, aunque pudo haberse
movido por tierra. Pero esperamos que cumpla la cita con la Fiscalía, la
cual ya pidió aplazar”, aseguró uno de los investigadores del caso
Piraquive.
Y agregó que saben que la mujer, de 64 años, permaneció seis días
acuartelada en el condominio de Cajicá, con sus asesores, contadores y
familiares, trazando la estrategia de su defensa.
Allí, el clan tiene cuatro casas, dos de ellas adquiridas recientemente por la pastora y por el senador Baena y su esposa, Lydia Raquel Hernández Corredor.
También se estableció que la líder de este clan religioso y político
está en conversaciones con el exprocurador Jaime Bernal Cuéllar para que
asuma su defensa en Colombia. Y que busca abogado en Estados Unidos,
país que, por solicitud de la Fiscalía, indagará su fortuna.
De hecho, hace un mes, Piraquive ordenó que se contratara a un
abogado en Argentina para que asumiera la defensa de la iglesia dentro
del expediente por lavado de activos que se le sigue a uno de sus
predicadores. Tal como lo reveló este diario, David Andrés Acevedo Muñoz
está acusado en ese país de liderar una red de lavado al servicio de la
banda narcocriminal de ‘los Urabeños’.
“La última actuación dentro del proceso es una solicitud ante la
Cámara de Apelaciones de Ciudad de La Plata, en la que un abogado pidió
la libertad de Acevedo”, le informaron a este diario en el juzgado
Primero de Lomas de Zamora (Argentina).
Y agregaron que no han enviado a Colombia la información porque están en vacancia judicial hasta el 30 de enero.
Millonarias donaciones
Mientras llega ese expediente, la pastora Piraquive, nacida en
Chipatá (Santander), tendrá que ir explicando por qué se negó a que le
hicieran la autopsia a su esposo, Luis Eduardo Moreno (muerto en 1996) y
cómo pasó de ser una modesta operaria de una fábrica de cubrelechos a
una empresaria multimillonaria.
La Fiscalía estima que su fortuna sobrepasa fácilmente los 14 millones de dólares.
Aunque el rastreo de las propiedades del clan se centró inicialmente
en Colombia y en Estados Unidos, las pesquisas se extenderán a Suiza,
Canadá, Austria, España, Holanda, Inglaterra, México, Panamá, Chile,
Ecuador, Bolívia y Perú.
La conexión es la fundación de la pastora: María Luisa de
Moreno International Foundation, Inc., creada el 8 de diciembre de 2006,
en Lauderhill, Florida. Esta ha recibido multimillonarios
aportes, exentos de imposiciones tributarias, cuyo origen se desconoce.
En el 2008, un anónimo que llegó a la Fiscalía señalaba que parte del
dinero llegaba de Estados Unidos y que era de un narcotraficante. Aunque
el expediente se había archivado, acaba de ser reabierto.
En cuanto al senador Baena, será escuchado en entrevista en los
próximos días y la Fiscalía decidirá si hay mérito para enviar su caso a
la Corte Suprema, debido a su investidura.
También evalúa si cita a los hijos de la pastora para que expliquen el origen de su fortuna.
Especialmente a César Eduardo Moreno Piraquive, exrepresentante legal
del movimiento Mira, quien también conoce los libros contables de la
iglesia. Además de lujosas casas en condominios en Florida, tiene allí
una empresa de transporte. Su hermano Iván es dueño de un par de
mansiones y maneja los ingresos del grupo Bitwy International, ligado a
la iglesia. La exsenadora Alexandra Moreno no tiene bienes registrados a
su nombre, al menos en Colombia.
Allegados a la familia dicen que va a explicar cada peso y que la
Fiscalía tendrá que responderles por el daño a su buen nombre y por la
ruina del Mira, que a mes y medio de las elecciones no ha podido hacer
campaña.
Baños, cada uno de 140 millones de pesos
Cinco baños para visitantes, cada uno de estos avaluado en
aproximadamente 140 millones de pesos –lo que puede equivaler al costo
de tres viviendas de interés social en Colombia–, forman parte de los
lujos de la millonaria mansión de la polémica pastora María Luisa
Miraquive, en Weston (Florida), a 45 minutos de Miami.
Por medio de personas que trabajaron para Piraquive en los últimos
años, EL TIEMPO conoció estos datos y las fotos de la vivienda de la
líder de la Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo.
Los baños fueron construidos hacia el 2010, según fuentes consultadas en la Florida.
Todos tienen ‘jacuzzi’ y en las construcciones predomina el ónix, una
piedra semipreciosa que se debe importar de Italia o Grecia. Cada
plancha de este material puede costar 3.500 dólares (unos 7 millones de
pesos), según las fuentes. La construcción de los baños, donde sobresale
un vitral similar al de una iglesia, con vidrio fundido en bronce,
tardó unos seis meses, reveló el peruano Juan Dávila, quien trabajó para
los Piraquive en la construcción de una iglesia en Weston.
Por sus costos, dichos vitrales son realizados de manera exclusiva
por fabricantes a petición de sus clientes. La misma fuente relató que
la grifería tiene un baño en oro.
Otra de las fotos muestra unas escaleras construidas en mármol, importado directamente desde España.
Estos lujos han causado indignación, teniendo en cuenta que, según
Óscar Bedoya Piraquive, sobrino de María Luisa (hoy distanciados), esa
fortuna se ha levantado “a punta del diezmo”, es decir, con la
contribución de los feligreses. Además se contradice con el discurso en
contra del materialismo de la propia pastora.
Dávila cuenta que terminó discutiendo con la pastora y su esposo,
Humberto Romero, por los presuntos malos manejos que ellos les dieron a
los dineros que se habían destinado para el templo.
Dávila cuenta que, por atreverse a denunciar en la iglesia las
irregularidades en la construcción del templo, terminó siendo expulsado.
Al parecer, Romero presentaba facturas con sobrecostos ante la iglesia
para manipular las inversiones. Davila señala que María Luisa, su esposo
y su yerno, Óscar Carrillo (esposo de su hija Perla), intentaron
comprar su silencio. “Me amenazaron con que Dios me iba a castigar”,
relató Dávila.
UNIDAD INVESTIGATIVA
u.investigativa@eltiempo.com
yeslan@eltiempo.com
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